China es un país que acoge más de 1.300 millones de personas. En este país hay católicos, protestantes, judíos, musulmanes, etc. Aunque existe tres religiones que siguen destacando, como el confucionismo, el taoísmo y el budismo.
Si viajas a este país conocerás una de las prácticas más extendidas. Es el culto a los ancestros, las familias veneran a los antepasados que han muerto porque creen que así consiguen su bendición y protección.
Para ello, les hacen ofrendas de incienso y comida ante sus retratos. “La cultura china del incienso existía ya hace miles de años, en la dinastía Han, y fue evolucionando», explicó Wang Chun-Chin, erudito venido de Taiwán. El experto añade: «La cultura del incienso es como una meditación”.
Un dato muy curioso es que el incienso ha sido una parte fundamental de la medicina tradicional china. Se ha usado para tratar diferentes enfermedades, ayudar a la curación, aliviar el dolor y estimular la energía.
La revista Cuerpomente informa que «el incienso se obtiene de las gomorresinas, que se extraen practicando una incisión en la corteza del tronco, normalmente del árbol africano y asiático del género Boswelia. Son de color blanco y se coagulan al contacto con el aire, transformándose en unos granos amarillentos, quebradizos, que cuando se queman emanan un aroma penetrante y muy relajante».
Desde la antigüedad se ha utilizado para atraer la buena suerte, pero en la actualidad también se utiliza en la práctica del yoga o mindfulness para estimular la relajación profunda.
Los profesionales de El Árbol de la Vida explican que el incienso aporta beneficios físicos y mentales, porque refuerza la relación entre lo físico y lo espiritual, activa los chakras, tiene propiedades antiinflamatorias…
Además, al respirarlo ayuda a fortalecer el sistema inmunológico. En la ciencia se ha ido utilizando para desarrollar nuevos medicamentos y tratamientos.
Está hecho de plantas aromáticas, como la mirra, el cinamomo o la canela. Los expertos explican que estas plantas tienen propiedades antivirales, antibacterianas y antifúngicas.
El incienso también se utiliza para la producción de perfumes, porque sus aceites esenciales tienen un aroma agradable.
La revista ¡HOLA! informa que «el aceite esencial de incienso es muy útil en tratamiento de la ansiedad y el estrés, ya que produce una agradable sensación de tranquilidad. Es además una solución efectiva para los dolores de cabeza y espalda. Su uso en aromaterapia ayuda a reducir las tensiones para calmar el organismo».
El incienso elimina la mala suerte
El Año Nuevo chino no siempre empieza en la misma fecha, por que se celebra en la segunda Luna Nueva después del solsticio de invierno.La fiesta también recibe el nombre de Año Nuevo Lunar o Fiesta de Primavera. Para celebrar el año nuevo se realizan varias tradiciones.
Los chinos optan por el ritual de las monedas que consiste en poner dos monedas dentro de una bolsita de color rojo y dejarlas ahí durante todo el día de Año Nuevo.
Durante los días siguientes, se ponen otras dos monedas y se deja pasar una semana. La bolsa se coloca en un lugar visible y cada día del año hay que añadir una moneda más. Ellos creen que con este ritual se puede atraer la fortuna y las buenas energías.
Otra tradición del Año Nuevo chino es el ritual de la limpieza. Consiste en limpiar toda la casa por completo para eliminar las malas energías.Después de limpiar, se enciende una varita de incienso en cada una de las estancias a excepción del baño.
Es fundamental que el incienso se consuma por completo, luego se ventila toda la casa para eliminar la mala suerte y la negatividad.
Beneficios del incienso
El incienso es utilizado por millones de personas de diferentes culturas. La quema del incienso en el hogar ayuda a equilibrar las emociones y eleva la serotonina en el cerebro.
También ayuda a conciliar el sueño y es un potente antibacteriano que previene infecciones. Algunos estudios han comprado que la quema de salvia es beneficiosa para tratar la demencia y enfermedades como el Alzheimer.
Además, los inciensos son ambientadores naturales que perfuman los espacios y transmiten las buenas energías donde fluyen los sentimientos de amor, abundancia y suerte.
Tienen diferentes aromas que son: vainilla, lavanda, ámbar, albahaca, jazmín, sándalo, palo santo, canela, etc. El incienso libera su aroma al ser quemado, tarda unos 45 minutos en consumirse. Hay distintos modelos, ya que puedes encontrarlo en varitas, conos y en granos.
La lavanda tiene propiedades curativas en aromaterapia, porque ayuda a calmar los nervios, posee propiedades relajantes, combate el dolor de cabeza y ayuda a apaciguar las emociones.
