Existen dos tipos de personas en el mundo. Solo dos: está el viajero solitario, ese que piensa en hacer un viaje y, automáticamente, quiere hacerlo solo y profundizar en su interior y en sus propios intereses… y en viajero en grupo, que son aquellos que prefieren ir en pequeños o grandes grupos para poder compartir experiencias y poder pasárselo en grande con mucha gente.
Ambos tipos de viaje tiene sus pros y sus contras, y en eso precisamente nos vamos a centrar: en las ventajas y desventajas que tienen cada uno de ellos.
Los viajeros solitarios suelen ser la inmensa minoría
La realidad es que, aunque muchos hayamos pensado alguna vez en realizar un viaje en solitario, pocos son los que se atreven y se lanzan a realizarlo. De hecho, has de saber que solo el 5% de los encuestados en 2009 diría “sí” a viajar solos.
Nos invaden miedos, preocupaciones, posibilidades que puedan pasar en el viaje… y pensar en realizarlo solos y enfrentarnos nosotros mismos a ese tipo de circunstancias puede originarnos una gran angustia interior.
Aun así, los beneficios y ventajas que nos ofrecen son muy numerosos… tanto en un extremo como en otro. Antes de decidir si quieres ir solo o no, párate a leerlas muy bien y piénsalo con calma.
Ventajas
-Para empezar, tu propio crecimiento personal. Enfrentarse solo al mundo asusta, es inevitable. Sentir que estamos solos frente a un problema y que nadie nos puede ayudar nos da miedo, sobre todo si estamos lejos de nuestra zona de confort. Por ello, decidir repentinamente que queremos hacer un viaje solos (¡y hacerlo!) puede conllevar un enorme crecimiento personal. Hacer cosas que normalmente no nos atrevemos a hacer origina un cambio en nosotros, nos obliga a tomar las riendas de las situaciones que nos rodean y a hacernos cargo de nuestra vida. En consecuencia, nos fuerza a tomar el control y a pensar en soluciones, a ser autosuficientes y pensar en alternativas si algo sale mal. Esto es algo que muchas veces nos agobia, porque suele ser difícil. Pero, al estar solo, no tendrás más remedio que dar lo mejor de ti para solventar las situaciones.
-También se potenciará tu autoestima. La autoestima es, y cito textualmente, “es el conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de comportamientos dirigidos hacia uno mismo, hacia nuestra manera de ser, y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y nuestro carácter. En resumen: es la evaluación perceptiva de nosotros mismos”. Si descubrimos que somos perfectamente capaces de cuidar de nosotros mismos estando solos (y, además, de resolver los problemas sin ayuda), la imagen que tenemos de nosotros mismos se vuelve más positiva. Nos vemos capaces, responsables y útiles, y eso ayuda a nuestra percepción personal.
–Podrás interiorizar en ti mismo, que es algo que casi nadie suele hacer hoy en día. ¿Y por qué interiorizar en nosotros mismos es tan importante? Pues porque nos ayuda a conocernos mejor a nosotros mismos, a comprendernos, a saber por qué sentimos cada emoción en cada momento (inteligencia emocional…). Incluso puede ayudarnos en ciertos momentos de nuestra vida a escucharnos para saber qué camino tomar. Porque normalmente las personas que están a nuestro alrededor hacen mucho, muchísimo ruido, y tratan de llevarnos por sus propios caminos. La única forma de saber cuáles son nuestros caminos es alejarnos de las voces ajenas y centrarnos en las nuestras propias. Y viajar solos nos ayuda mucho a hacer esto.
-Esto, a su vez, nos ayuda a ser autosuficientes, que no es otra cosa que poder hacer las cosas y llevar las riendas de tu vida sin necesitar de intervención externa o ayuda para conseguirlo. Una persona es autosuficiente cuando es perfectamente capaz de valerse por sí misma, de hacer las cosas sin depender de los demás y de solucionar los problemas de sin necesitar que otra persona los solucione por ella. Y te aseguro que nada te hace más autosuficiente que hacer un viaje sin compañía.
-Otro beneficio importante es que haces lo que tú desees hacer todo el tiempo, sin adaptarte a los gustos de los demás. Al estar completamente solo, tú planificas tu día a día basándote en lo que a ti te gusta y en tu estado de ánimo, y no en el de los demás. Por lo tanto, el viaje en solitario se convierte en un viaje en el que haces lo que quieras, cuando quieras y a la hora que quiera. Punto. Y eso da una libertad increíble.
-Si encuentras a otros viajeros solitarios por el camino, aprenderás a socializar. Cuando una persona va sola, por ejemplo, haciendo el Camino de Santiago, y se encuentra a otros peregrinos por el camino, tienes la opción de acercarte a otras personas para conocer gente nueva y diferente. Y, además, puede que descubras formas diferentes de ver las cosas que ni siquiera te habías planteado.
Desventajas
-Aunque no lo creas, ir solo es una gran desventaja. Si te pones enfermo, te pierdes o te pasan cosas malas por el camino, no podrás apoyarte en nadie. Estarás solo, y, aunque en sí mismo es una gran ventaja, también es una gran desventaja que puede ponerte en serio peligro muchas veces. Puedes sufrir robos, intimidaciones, puedes ponerte malo y no tener quien te cuide…
–El miedo es mucho mayor si vas solo. Porque yendo acompañado siempre puedes sobreponerte a ciertas circunstancias con ayuda… pero yendo solo no tienes esta opción. Por lo tanto, tu miedo es mucho mayor que si vas en compañía.
-Si vas solo, el alojamiento puede llegar a ser más caro. Esto es así porque no es lo mismo pagarse una habitación para sí mismo que una casa para unas cuantas personas. El alojamiento, la comida, las visitas… No siempre, pero viajar solo puede llegar a ser muy caro, dependiendo del sitio al que te vayas a hacer turismo.
Los viajeros en grupo suelen pasárselo mucho mejor que los solitarios
Son muchísimas las personas que deciden emprender la magia de hacer un viaje en compañía. Y, si sigues leyendo con atención, verás las ventajas y desventajas que te encontrarás en un viaje en grupo.
Ventajas
–Siempre hay gente contigo, por lo tanto, corres mucho menos peligro. Al ir en grupos grandes, los bandidos callejeros se lo pensarán dos veces antes de asaltarte, porque ellos no suelen arremeter contra los grupos. Un viaje en grupo es lo mejor para ir protegido y seguro.
-Ya vayas en grupo con amigos o con completos desconocidos, ¡no tendrás tiempo para aburrirte! Un viaje acompañado de otras personas es sinónimo de diversión. Al estar siempre rodeada de personas, jamás tendrás el problema del silencio o del no saber qué hacer: siempre habrá alguien que propondrá algo, que haga uno o dos chistes o que desee tomar el mando del grupo. Por lo tanto, un viaje en grupo te dará más facilidad para no tener que tomar las riendas de todo.
-Los viajes en grupo son más baratos porque se comparten los gastos. Desde Pazo Cibrán nos comentan que una de las posibilidades de viajar acompañado son los alquileres para grupos, lo que hace la estancia en los lugares mucho más económicas que si viajases solo. Los grupos tienden a coger ofertas de hostales y hoteles por grupo para ahorrarse un buen pico. Pero no solo en alojamiento: en comida, en acceso a sitios… todo es más económico si viajas acompañado.
–Si viajas con personas de diferentes personalidades y gustos, aprenderás un montón de cosas nuevas. Porque viajar con personas que no conozcas y diferentes a ti te garantiza risas, despiporre y conversaciones que no esperarás. Es una buena forma de asegurarte un viaje divertido y lleno de cosas inesperadas.
Desventajas
–Olvídate de la intimidad. Porque, al ir acompañado, no vas a tener momentos para ti solo, para interiorizar o para escaparte. Ir acompañado es ir todo el tiempo con otras personas, y eso anula bastante los momentos íntimos y personales que puedas tener.
–Si viajas en un grupo de personas desconocidas, puedes encontrarte en un grupo con gustos muy diversos. Y eso puede significar problemas para decidirte. Por ejemplo, una vez fui de viaje a Holanda y la mayoría quería ir a una discoteca… y a mí, particularmente, no me gustan nada. ¡Me agobian! Me vi obligada a ir porque el 95% de las personas querían ir, y la verdad es que lo pasé mal. Pueden pasarte este tipo de cosas.
–Si te encuentras personas lentas y tú eres muy activo, puedes desesperarte. A nadie le gusta ser activo y encontrarse en un grupo donde las personas sean lentas. Sentimos desesperación y lentitud, pero no podemos obligarlos a ir más rápido porque sería irrespetuoso. Vas a tener que amoldarte al paso general del grupo.
–No todos van a tener la misma capacidad de solvencia. Porque quizás tú has ahorrado mucho para el viaje… pero otra persona no ha tenido esa opción y cuenta con un presupuesto más modesto. Te encontrarás con dificultades para poder hacer todo lo que quieras, porque puede que no todos se lo puedan permitir.
Todo dependerá de si eres más solitario o social
A mí me encanta viajar en grupo… pero estos últimos meses estoy sintiendo la necesidad de hacer un viaje sola. Y tarde o temprano lo haré, es cuestión de tiempo.
¿Cómo te gusta viajar a ti?